Y ahora... Un videopoema

Las imágenes las había grabado con esta intención de hacer Renuncias, videopoema de la serie Trabajo al día. Y la música también, la produje con Launchpad, para esta pieza. Solo faltaba ensamblar la voz a las imágenes y la música, que me quedó bien dub y eso me hace feliz. Y restaba tomar algunas decisiones con respecto al ritmo en el que sonaría la voz y se acoplaría con la música. 

El ensamblaje se demoró porque entre la grabación de las imágenes en Bucaramanga, la producción de la música y este momento en que termino el videopoema, me pasó lo del exilio. Hoy domingo, decidí terminar y aquí está mi idea de expresar mi pasión por las cosas desgastadas, roídas por acción del fuego y del agua, sobre las que crecen líquenes, mohos, óxidos, maleza que las desfigura o que las retorna, mejor dicho, a una figura más natural, más honesta. Se convierten así en una manifestación de la  unidad de la materia terrestre. Sin las imágenes de este videopoema y sin la música lenta y la voz arrastrada, un poco robótica, el poema discursivo no está completo. Así necesito expresarlo. 

Ahora estas imágenes guardadas en la nube de Google no se perderán tan fácilmente. No seguirán el camino de todo lo que se me ha perdido de Bucaramanga. Aunque ya aprendí que es mejor perder, desprenderse, sin orgullos. Y justo de eso se trata Renuncias. Prefiero esta libertad de casa abandonada que es el exilio. 

Mientras grababa la voz, sonó un trueno que quedó bien producido. Así que el cielo de CDMX se lleva ese crédito. 

Continuaré produciendo la serie de videopoemas, que también es Trabajo al día. Hoy, 25-04-22, 17:00 es la presentación del libro del mismo nombre, que reúne los poemas en su forma discursiva, en la Feria del libro de Bogotá. Yo estaré virtualmente y mi querida amiga poeta Camila Charry me salvará la patria en la sala de Ecopetrol. Me gustaría haberme convertido en un fantasma y, pues, aparecer. ¡...Momento!  




 

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